Las declaraciones de Arturo Martínez sobre los profesores de filosofía
moverían a la carcajada si no fuera porque están emitidas por el
Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, la multisindical más
grande del país. En verdad conviene analizar sus declaraciones no como
el resultado de una persona ignorante, un oligarca del sindicalismo o
simplemente un desatinado de marca mayor, aunque pudiera haber algo de
estos tres elementos. Sus declaraciones se enmarcan en un contexto
evidente sobre las movilizaciones que se están produciendo en el país:
"Queremos que nuestras convocatorias sean limpias y no estamos
dispuestos a aceptar que vengan a empañarlas los muchachos, y quiénes
están detrás de ellos, porque hay profesores de filosofía detrás de toda
esta cuestión violenta, que está institucionalizándose en el país".